Fuente: Copernicus y Zeke Hausfather - Enero 2021

Según los últimos datos de Copernicus, el año 2020 fue el más cálido registrado en tierra firme por un margen holgado. La superficie terrestre fue 1.94°C más caliente que en el periodo preindustrial. Esto a pesar del fenómeno de enfriamiento de La Niña.

Globalmente (temperatura de superficie y océanos) es un empate con el año 2016 pero en este último año estaba el fenómeno de El Niño que es de calentamiento, al contrario de lo que sucedió este año con La Niña.

El Servicio de Cambio Climático de Copérnico (C3S) revela hoy que el año 2020 a nivel mundial estuvo empatado con el anterior año más cálido, el 2016, convirtiéndose en el sexto de una serie de años excepcionalmente cálidos a partir de 2015, y el período 2011-2020 en la década más cálida registrada.

Mientras tanto, Europa vio su año más cálido registrado, 0,4°C más cálido que 2019 que fue previamente el año más cálido. Junto con el Servicio de Monitoreo de la Atmósfera de Copérnico (CAMS), el C3S también informa que las concentraciones de CO2 en la atmósfera han continuado aumentando a una tasa de aproximadamente 2,3 ppm/año en 2020, alcanzando un máximo de 413 ppm durante mayo de 2020. Tanto el C3S como el CAMS son implementados por el Centro Europeo de Pronósticos Meteorológicos de Medio Alcance en nombre de la Comisión Europea con financiación de la Unión Europea.

El conjunto de datos de C3S para las temperaturas del aire de la superficie muestra que:

• A nivel mundial, el 2020 estuvo a la par con el récord del 2016

• El año 2020 fue 0,6°C más cálido que el período de referencia estándar de 1981-2010 y alrededor de 1,25°C más que el período preindustrial de 1850-1900

• Esto hace que los últimos seis años sean los seis más cálidos de los que se tenga constancia.

• Europa vio su año más cálido registrado con 1,6°C por encima del período de referencia 1981-2010, y 0,4°C por encima de 2019, el año más cálido anterior

• La mayor desviación de la temperatura anual con respecto a la media de 1981-2010 se concentró en el Ártico y en el norte de Siberia, llegando a más de 6°C por encima de la media

Además, las mediciones por satélite de las concentraciones globales de CO2 atmosférico muestran que:

• El máximo promedio de la columna global de CO2 alcanzó 413 ppm

• El CO2 continuó aumentando en 2020, incrementando en 2,3 ± 0,4 ppm, un poco menos que la tasa de crecimiento del año anterior.

La situación en Siberia

Algunas partes del Ártico y el norte de Siberia experimentaron algunas de las mayores desviaciones de la temperatura anual con respecto a la media en 2020, con una gran región que vio desviaciones de hasta 3°C y en algunos lugares incluso más de 6°C para el año en su conjunto. Mensualmente, las mayores anomalías positivas de temperatura para la región alcanzaron repetidamente más de 8°C. Siberia occidental experimentó un invierno y una primavera excepcionalmente cálidos, un patrón que también se observa durante el verano y el otoño en el Ártico siberiano y en gran parte del Océano Ártico.

Además, la temporada de incendios forestales fue inusualmente activa en esta región, con incendios detectados por primera vez en mayo, que continuaron durante todo el verano y hasta bien entrado el otoño. Como resultado, hacia el polo del Círculo Ártico, los incendios liberaron una cantidad récord de 244 megatoneladas de dióxido de carbono en 2020, más de un tercio más que el récord de 2019. Durante la segunda mitad del año, el hielo marino del Ártico fue significativamente inferior a la media de la época del año, y en julio y octubre se registró la menor extensión de hielo marino de la que se tiene constancia para el mes respectivo.

En general, el hemisferio norte experimentó temperaturas superiores a la media durante el año, aparte de una región sobre el Atlántico Norte central. En cambio, en algunas partes del hemisferio sur se registraron temperaturas inferiores al promedio, sobre todo en el Pacífico ecuatorial oriental, lo que se asocia a las condiciones más frescas de La Niña que se desarrollaron durante el segundo semestre del año. Es notable que el año 2020 iguala el récord de 2016 a pesar del enfriamiento de La Niña, mientras que 2016 fue un año récord que comenzó con un fuerte evento de calentamiento de El Niño.

Los promedios anuales de la temperatura del aire mundial a una altura de dos metros se estima que cambian desde el período preindustrial (eje izquierdo) y en relación con 1981-2010 (eje derecho) según diferentes conjuntos de datos

Europa 2020: el año más cálido que se haya registrado

El año 2020 fue el más cálido de Europa registrado, y estacionalmente el invierno 2019/20 y el otoño 2020 fueron también los más cálidos registrados. El invierno de 2020, es decir, de diciembre de 2019 a febrero de 2020, superó al anterior más cálido de 2016 en casi 1,4°C, mientras que el otoño (septiembre a noviembre de 2020) superó el antiguo récord establecido en 2006 en 0,4°C. Además, Europa occidental experimentó una importante ola de calor a finales de julio y principios de agosto. Los siguientes cuatro años más cálidos para Europa también ocurrieron durante la última década.

Un completo y detallado análisis del clima de Europa será publicado en abril cuando Copérnico presente su informe anual sobre el Estado del Clima en Europa 2020.

Carlo Buontempo, Director del Servicio de Cambio Climático de Copérnico (C3S), comenta: "2020 destaca por su excepcional calor en el Ártico y un número récord de tormentas tropicales en el Atlántico Norte. No es sorprendente que el último decenio haya sido el más cálido que se haya registrado, y es un recordatorio más de la urgencia de reducir ambiciosamente las emisiones para prevenir los impactos climáticos adversos en el futuro".

Las concentraciones de CO2 siguen aumentando en 2020

El análisis de los datos de los satélites revela que las concentraciones de dióxido de carbono han seguido aumentando en 2020, alcanzando un máximo mundial sin precedentes, promediado en columna, de aproximadamente 413,1 ppm. La tasa media anual estimada de crecimiento del XCO2 para 2020 fue de 2,3 ± 0,4 ppm/año. Esto es menos que la tasa de crecimiento en 2019, que fue de 2,5 ± 0,2 ppm/año y también menos que el aumento de 2,9 ppm/año en 2015 y 2016. Sin embargo, 2015 y 2016 experimentaron un fuerte evento climático de El Niño, que dio lugar a una mayor tasa de crecimiento atmosférico debido a una absorción más débil de lo normal del CO2 atmosférico por parte de la vegetación terrestre y a grandes emisiones de CO2 de los incendios forestales, particularmente en Indonesia en esos años. Los incendios forestales en el Ártico y Australia en 2020, aunque de una magnitud sin precedentes en sus regiones, representan sólo una pequeña fracción de las emisiones mundiales de los incendios.

Vincent-Henri Peuch, Director del Servicio de Vigilancia de la Atmósfera de Copérnico (CAMS), comenta: "Aunque las concentraciones de dióxido de carbono han aumentado ligeramente menos en 2020 que en 2019, esto no es motivo de complacencia. Hasta que las emisiones globales netas se reduzcan a cero, el CO2 continuará acumulándose en la atmósfera e impulsando un mayor cambio climático".

En el contexto de la pandemia COVID-19, el Proyecto Mundial del Carbono ha estimado que hubo una reducción de alrededor del 7% de las emisiones de CO2 fósil.

"Hasta qué punto esto fue un factor en el menor aumento total es discutible, sin embargo, ya que las variaciones en la tasa de crecimiento mundial están dominadas por los procesos naturales. Debemos continuar los esfuerzos para disminuir las emisiones netas de CO2 para reducir el riesgo del cambio climático", añade Vincent-Henri Peuch.

"Los extraordinarios acontecimientos climáticos de 2020 y los datos del Servicio de Cambio Climático de Copérnico nos muestran que no tenemos tiempo que perder. Debemos unirnos como comunidad mundial, para asegurar una transición justa hacia un futuro neto cero. Será difícil, pero el costo de la inacción es demasiado grande, por lo que los compromisos asumidos en el marco de nuestro Acuerdo Verde Europeo son muy necesarios", destaca Matthias Petschke, Director de Espacio, Dirección General de Industria de Defensa y Espacio de la Comisión Europea.