Fuente: Slowmovement - Por Lily Tomlin
El problema de la carrera de ratas es que, aunque ganes, sigues siendo una rata.
La palabra en inglés es downshifting: se trata de un término para englobar a las personas que deciden cambiar a un estilo de vida de menos gasto, menos consumo y por ende menos trabajo con el fin de disfrutar de otras cosas de la vida.
¿Quién no ha querido salir de la acelerada cinta del trabajo y conseguir un poco de equilibrio en la vida? La mayoría de nosotros, en un momento u otro, hemos querido salir de la vía rápida de la vida hacia un estilo de vida más satisfactorio, más sano y menos centrado en el trabajo.
¿Qué es un downshifter?
Los downshifters son personas que adoptan una simplicidad voluntaria a largo plazo en su vida. Aceptan menos dinero y menos horas de trabajo para tener tiempo para las cosas importantes de la vida. Los Downshifters también hacen hincapié en consumir menos para reducir su huella ecológica.
¿Por qué hacemos downshift?
Hay dos aspectos principales en el downshifting. Uno tiene que ver con la conexión -la conexión con la vida, la familia, la comida, el lugar- y el otro con el mantenimiento de un equilibrio saludable -el equilibrio en los aspectos personales, laborales, familiares, espirituales, físicos y sociales de su vida-.
Las investigaciones han demostrado que los habitantes de Estados Unidos, y sería similar para otros países occidentales, tienen aproximadamente cinco horas más de tiempo libre a la semana que hace 30 años. Gracias a la modernidad realizamos menos tareas domésticas, tenemos menos hijos y nos jubilamos antes. Pero estamos más ocupados que nunca. Aunque tenemos más tiempo libre, una gran parte de ese tiempo se dedica a ver la televisión, y el resto de nuestro tiempo "libre" se dedica a obligaciones de ocio. Estas obligaciones de ocio ocupan el lugar de las fuentes tradicionales de significado en nuestra vida, como las tradiciones religiosas, la comunidad, etc. El ocio es ahora un medio para un fin que no se realiza por sí mismo. Nuestras obligaciones de ocio tienen un propósito: estar en forma, socializar o cumplir con las expectativas.
Básicamente, los que han bajado de categoría buscan una vida llena de más pasión y propósito, sentido, realización y felicidad. Una vida a la que mirar sin remordimientos.
Los que hacen downshifting quieren ir más despacio en el trabajo para poder hacer upshifting en otras áreas de su vida. Para la mayoría de las personas, el cambio a una vida lenta mediante el downshifting se produce después de una larga búsqueda de la verdadera felicidad y realización. Para otros puede llegar tras un acontecimiento vital importante, como una enfermedad grave, la ruptura de una relación, la quiebra o la muerte de alguien cercano.
Downshifting: A Guide to Happier Simpler Living es un libro que le informará sobre el downshifting y sus beneficios. Este libro nos ayuda a entender por qué el downshifting es la única opción sensata. Es motivador, pero no muy instructivo en cuanto a cómo hacerlo. Es bueno leerlo si aún no estamos preparados para dar el paso, ya que nos ayudará a ver que simplemente debemos hacerlo.
¿Cómo es un downshifter?
¿Cuál es el perfil de un downshifter? Bueno, como hemos visto, o bien se han cuestionado la vida durante algún tiempo o han sufrido un acontecimiento vital. En cuanto a la demografía, no hay rasgos específicos que identifiquen a los downshifters o posibles downshifters. Son trabajadores de cuello azul y de cuello blanco. Lo más probable es que tengan treinta, cuarenta o cincuenta años, aunque pueden ser más jóvenes o mayores.
Quitar las capas
Los que cambian de categoría tienen dos cosas en común. En primer lugar, y lo más importante, creen que la búsqueda excesiva de dinero y materialismo tiene un coste sustancial para sus propias vidas y las de sus familias. En segundo lugar, los downshifters asumen la responsabilidad de su situación. En lugar de quejarse y esperar que el gobierno haga algo, toman medidas para cambiar sus propias vidas.
¿Cómo podemos reducir el nivel de vida?
Podemos reducir el número de horas de trabajo en nuestro actual empleo, o aceptar un trabajo con menos responsabilidad en la empresa, o podemos dejar nuestro trabajo y encontrar otro que nos resulte más gratificante. O podemos montar nuestro propio negocio a tiempo parcial o completo, quizás trabajando desde casa.
Aunque podemos quedarnos donde estamos para hacer el downshift, aunque sea en los suburbios, mucha gente se traslada a otros lugares, por ejemplo a la costa o a las zonas rurales.
A veces, los que cambian a la baja descubren que ganan más dinero, pero que son más felices y se sienten más realizados, normalmente porque han encontrado algo que les apasiona y el trabajo ya no es un trabajo.
Si estás pensando en reducir la actividad, el primer paso práctico es averiguar cómo trabajar menos, liberando tiempo para actividades valiosas. Cuando reduzcas los gastos (cosa que harás viviendo de forma sencilla), descubrirás que puedes vivir con menos ingresos y, en consecuencia, trabajar menos horas.
Si queremos una guía clara, paso a paso, de cómo reducir la jornada laboral, Downshifting: How to Work Less and Enjoy Life More (Cómo trabajar menos y disfrutar más de la vida), de John Drake, nos proporciona todo lo que necesitamos saber. Este libro es de fácil lectura y nos proporciona formas reales de reducir el ritmo de trabajo. Nos ofrece una amplia gama de opciones prácticas para reducir el ritmo de trabajo e historias reales de personas que han logrado reducir el ritmo de trabajo en diversas situaciones de la vida. Garantiza la inspiración y el estímulo. John Drake, un ejecutivo de éxito que optó por la reducción de jornada, describe las opciones prácticas que se pueden llevar a cabo.