Fuente: Rewalding Europe
La resalvajización de la tierra es un enfoque progresista de la conservación. Se trata de dejar que la naturaleza cuide de sí misma, permitiendo que los procesos naturales den forma a la tierra y al mar, reparen los ecosistemas dañados y restauren los paisajes degradados. Mediante la repoblación forestal, los ritmos naturales de la vida silvestre crean hábitats más salvajes y con mayor biodiversidad.
El rewilding trata de:
Los caminos de la naturaleza
La naturaleza es la que mejor conoce la supervivencia y el autogobierno.
Podemos echarle una mano creando las condiciones adecuadas: eliminando diques y presas para liberar los ríos, reduciendo la gestión activa de las poblaciones de fauna y flora, permitiendo la regeneración natural de los bosques y reintroduciendo las especies que han desaparecido como consecuencia de la acción del hombre.
Después, deberíamos dar un paso atrás y dejar que la naturaleza se gestione a sí misma.
Recuperar la vida silvestre
Las especies silvestres han disminuido mucho, incluso en nuestras zonas más salvajes. Algunas de ellas incluso se han extinguido, aunque desempeñan un papel ecológico de vital importancia. El objetivo de la repoblación es restablecer los grupos de especies perdidos, dándoles espacio para prosperar, aumentando la población y reintroduciendo especies autóctonas clave.
Garantizar el bienestar
Cuando la naturaleza está sana, nosotros también lo estamos. Dependemos de la naturaleza para obtener agua, alimentos y aire. Cada vez es más evidente que la conexión con la naturaleza salvaje nos hace sentir bien y nos mantiene mental y físicamente bien.
La resalvajización forestal consiste en reconectar la sociedad moderna, tanto rural como urbana, con la naturaleza salvaje. Invitamos a la gente a experimentar y vivir en estos nuevos paisajes re-silvestres.
Un futuro con éxito
No hay un punto final definido para la repoblación forestal. El objetivo es apoyar los procesos impulsados por la naturaleza, que a su vez darán lugar a una naturaleza más salvaje. Esto requiere tiempo y espacio. La repoblación forestal consiste en ascender en una escala de naturaleza salvaje, en la que cada paso que se da hacia arriba se considera un progreso.
Si creamos y protegemos zonas en las que se pueda llevar a cabo la repoblación forestal, tanto las personas como la fauna se beneficiarán a largo plazo.
"Rewilding consiste en confiar en las fuerzas de la naturaleza para restaurar la tierra y el mar".
¿Por qué es vital el rewilding?
Nuestros ecosistemas necesitan recuperarse
No sólo tenemos que proteger la naturaleza, sino también restaurarla. Muchos ecosistemas -la base de nuestra riqueza natural- están rotos. La repoblación forestal ofrece una oportunidad histórica para recuperarlos. Los ecosistemas robustos y conectados nos hacen más resistentes a los impactos del cambio climático.
Necesitamos especies clave
Estas especies vitales, incluidos los principales depredadores y los grandes herbívoros, impulsan los procesos ecológicos. La fauna silvestre está volviendo a aparecer en Europa, pero su número sigue siendo bajo. La reforestación acelerará su recuperación y restaurará importantes cadenas alimentarias y cascadas tróficas.
Una naturaleza más salvaje como aliada
Los ecosistemas que funcionan de forma natural son mejores para proporcionarnos aire y agua limpios, evitar inundaciones, almacenar carbono y ayudarnos a adaptarnos al cambio climático. La repoblación forestal vincula la ecología con las economías modernas, donde la naturaleza salvaje actúa como aliada para resolver los problemas socioeconómicos modernos.
Las comunidades se benefician
La repoblación forestal impulsa las economías locales cuando las alternativas son escasas. Trabajamos para que el turismo de naturaleza florezca y la población local se gane la vida de forma justa con empresas basadas en la naturaleza. Esto ayudará a revitalizar las comunidades rurales y urbanas.
Los lugares salvajes inspiran a la gente
Experimentar la emoción de la naturaleza salvaje reconecta a las personas con nuestro planeta vivo. Esto mejora la salud y el bienestar y crea un sentimiento compartido de humanidad y orgullo, tanto en el campo como en las ciudades.
Los caminos de la naturaleza son rentables
Creemos que la naturaleza es totalmente capaz de cuidar de sí misma. Esto significa dejar que los procesos naturales den forma a nuestros paisajes y ecosistemas, en lugar de que las personas realicen una gestión activa que a menudo requiere costes elevados y recurrentes. Los paisajes autorregulados son más sostenibles a largo plazo.